Blasco Joyero: “Comprometidos con la excelencia”
Blasco Joyero ocupó las calles de Murcia en 1974 gracias al espíritu emprendedor de su fundador, Diego Blasco. Casi cincuenta años después, nuestra esencia y pasión por la alta joyería se mantiene y adapta a los tiempos modernos más actuales.

Para este ambicioso proyecto de reforma integral de nuestro local, cedimos nuestras llaves al grupo de profesionales Acro Construcciones Y Reformas que lograron realizar, en tiempo récord, un fantástico trabajo dentro de los plazos inicialmente estipulados. Con ellos, entablamos una fructífera conversación en busca de orientación para nuestro proyecto y dotar al espacio de nuestra antigua boutique, la comodidad propia de un lugar donde el cliente se sienta como en casa.
Buscábamos que nuestro segundo hogar mantuviera y conservara – con la misma efectividad de un invernadero -, esa aura que nos caracteriza: nuestra vocación por la manufactura artesanal de la joyería más exquisita, exclusiva y única. Por ello, nuestro establecimiento es un fiel reflejo de nuestra alma, lo que nos apasiona y nos hace diferentes. Llevamos “El arte de la joyería llevado a su máximo exponente” por bandera. Pues, ante todo, estamos “Comprometidos con la excelencia”.

Aunque decidimos respetar la distribución inicial de nuestro local, ahora contamos con un pequeño espacio recibidor y zona de espera para la total comodidad de nuestros clientes. Así como, dos despachos completamente equipados con una tecnología puntera para ofrecerles el mejor servicio posible, el más eficaz y veloz.

El interior se caracteriza por una paleta cromática cálida en tonos cremas y nuestro verde corporativo, que transmiten sensación de paz y calma… el ambiente idóneo para abandonarse al mero placer de encontrar, sin prisa, la joya de tus sueños.
También concedimos cierto protagonismo a las curvas, ya que generan una sensación de suavidad y fuerza que ayudan a crear impacto, conectar espacios y dar sensación de mayor amplitud. Quisimos hacer un pequeño guiño a nuestros inicios y mantener zonas con toques en madera, principalmente, en el interior de los despachos y en los tabiques curvos.
Dentro de todo este mar de calma, hallamos elementos de contrapunto que rompen, ligeramente, con esa armonía minimalista y monocromática. Elementos decorativos en piedra retroiluminada que firman nuestros amigos de Mármoles Pedro Lifante – también autores de la espectacular mesa de ónix blanco del espacio recibidor -, decoran las paredes de ambos despachos y aportan ese punto de luz al espacio de un modo distintivo y original.
Por último, el punto más importante de conexión y comunicación entre el cliente y nosotros, Blasco Joyero: el imperante mostrador de la entrada fabricado en krión blanco, con nuestro logotipo actualizado y retroiluminado. Un espacio de conversación y un primer contacto abrazado por el halo de múltiples luces cálidas con el que pretendemos la mejor de las bienvenidas.
Un proceso de mejora que nos ha hecho rememorar nuestros propios comienzos y, a lo largo del cual, el cliente siempre ha ocupado una posición preferente en nuestra mente a la hora de embarcarnos en esta pequeña aventura.
Queremos seguir evolucionando, creciendo y mejorando en nuestro oficio; siempre adaptándonos a los nuevos tiempos e intereses de nuestros clientes. Ésta es y será también vuestra nueva casa. A por otros cincuenta años más.