EM. ¿Quién es Esther González y cuál es su experiencia profesional?

EG. Soy una humilde (“curranta del norte”) nutrida en la comercialización y sus entresijos. Estudié un BA en Business Administration en Sheffield, UK. Me inicié en la comercialización internacional, durante 7 años en un departamento de exportación. De allí di el salto a la promoción de marca, tanto nacional como internacional. Este mundo me estaba esperando. Me hice experta en comunicación estratégica. Ayudé a personas y organismos a encontrar su diferenciación y cómo comunicarla. El mundo del vino me enganchó, y hoy creo firmemente que me dedico a lo que mejor sé hacer.

EM. La D.O. Jumilla es una de las más antiguas de España y es un referente del vino del sudeste español, ¿cómo logra ser la responsable de comunicación de este consejo regulador?

Mi experiencia y trayectoria profesional hicieron que fuera la persona elegida en el proceso de selección para afrontar este reto. La voluntad, y la oportunidad se unieron para que esté hoy divulgando Jumilla en todo el mundo, trabajando con un equipo estupendo y la comunidad 39 bodegas comprometidas, que trabajan muy duro.

EM. ¿Cómo es un día de trabajo suyo en la D.O. Jumilla?

El nivel de trabajo es exigente; y en mi área siempre hay golpes de timón. Pocas veces terminas el día haciendo lo que has planificado. Es la parte especial de la comunicación. La tónica en la DOP Jumilla es el compañerismo y el consenso. Somos un equipo sólido, y una gestión apoyada por todos los protagonistas; bodegas y viticultores avanzan en línea y diseñan las líneas de actuación en conjunto.

EM. ¿Dónde vive Esther González su infancia y qué es lo que más extraña de allí?

La vivo en familia -numerosa-, rodeada del amor y el aprendizaje de los míos. Una infancia con mudanzas y vendimias…  Prefiero mirar adelante, pero podría decir que extraño el río Sil a su paso por el Barco de Valdeorras; el flujo eterno de su caudal me influencia y me da mucha energía.

EM. ¿Cómo está trabajando la D.O. Jumilla la comunicación digital?

La comunicación digital es siempre cuestionada y reformulada. Lo que funciona hoy sabemos que no funciona mañana. Estamos continuamente analizando y viendo los cambios. El mundo digital es muy cambiante, se reduce y se amplia constantemente en ambas direcciones.

Además de un continuo trabajo interno, tenemos un equipo externo de analistas que nos ayudan a reformular nuestra estrategia de comunicación y programar. Intentamos crecer seguidores de forma orgánica, añadiendo contenidos de valor, y una estética cuidada. Estamos generando contenidos propios y analizando los distintos canales donde debemos comunicar.

EM. El reputado chef murciano Pablo González-Conejero ha empezado a formar parte de la Familia Jumilla y llevará la marca bordada en su chaquetilla, ¿cuál entiende que ha sido la clave del éxito de la campaña “Familia Jumilla”?

Esta campaña se forjó en pleno confinamiento. Quisimos estar cerca de quien peor lo estaba pasando y apoyar a la hostelería como principal eslabón de nuestra cadena de valor. Sobre todo la hostelería de la Región de Murcia, cuyos profesionales ofrecen y recomiendan los vinos DOP Jumilla a locales y visitantes. Pablo está en la línea de los grandes chefs, que fomentan el consumo de cercanía y ayudarse unos a otros, apoyando lo rural que forja nuestra identidad. La gastronomía y sus primeras líneas están demostrando que se puede cambiar el modelo de consumo, y por lo tanto la realidad de este mundo. Su alta sensibilidad lo trajo a Jumilla, donde siempre ha estado realmente. Su llegada a la familia y nuestro logo en su chaquetilla es un símbolo de que la unión hace la fuerza y de que la gastronomía de la Región es inherente a la DOP Jumilla.

EM. ¿Qué importancia le da la D.O.P. Jumilla a la comunicación?

Yo creo que la importancia de la comunicación ya es algo irrebatible y desde el CRDOP Jumilla se le da máxima importancia a nuestra marca y su posicionamiento. La comunicación, además tiene esa propiedad de cambiar y transformar todo. No sólo es el altavoz, también el espejo donde mirarse, y debemos ser muy conscientes de quien somos y cómo somos para que se nos conozca y se nos quiera.

EM. ¿Qué cree que nos falta en notoriedad?

El mundo del vino es altamente competitivo. Por mucho ruido que busquemos hacer siempre habrá otro que hace más ruido. Por muy creativos que queramos ser, siempre habrá otro que ha llegado antes. Aunque está bien valorar el progreso de uno mismo, no conviene obsesionarse. Trabajando y construyendo se llega, poco a poco, avanzando, pero la meta nunca se alcanza.

Aquí el reto es traducir en ventas todas nuestras acciones. Que las bodegas sientan que el mercado tira de sus proyectos es la única forma que todo esto revierta en el campo y en el mundo rural del que venimos.

EM. ¿Es el vino un mundo de hombres?

Lo único que tiene “el vino” de masculino es el sustantivo. El vino en esta parte del mundo es agricultura y transformación; Tradición. Cultura y supervivencia también. Las mujeres siempre han formado parte fundamental de la economía familiar, de la agricultura, y también han bebido (y beben) el vino.

Aquí en la Región de Murcia es además ejemplo de sostenibilidad, dado que nuestras viñas de Monastrell sobreviven sin riego en una agricultura amenazada, más que nunca la mujer es símbolo de resiliencia, como nuestras viñas.

Además, como siempre decimos, hay mujeres trabajando en todos los escalafones del sector del vino, y desde luego, es una consumidora a tener muy en cuenta.

EM. ¿Cree que las mujeres siguen luchando por conquistar su espacio personal y profesional en todos los ámbitos sociales?

Por supuesto. El desarrollo profesional es una lucha continua, y el espacio personal también. La identidad y el espacio de cada uno es algo que se va forjando, independientemente del género. Hay que pelear.

EM. ¿En qué está trabajando el área de comunicación de la D.O. Jumilla para este año?

Este año esperamos tener una pequeña erupción con varios proyectos en los que lleva trabajando nuestro presidente Silvano García desde que llegó a dirigir la DOP Jumilla en 2019. Ya estamos viendo algunas buenas noticias y promoción; a nivel Regional, nuestro acuerdo con Las Noches del Malecón nos llena de positividad. Estamos organizando unas catas por el barco sostenible en el Río Segura desde enero, y vamos a hacer más actividades relacionadas con el ocio, y el consumo juvenil que nos emocionan mucho. También esperamos en cuanto se pueda, realizar la gran Feria del Vino DOP Jumilla que se merece Jumilla, y sea una fecha a marcar en el calendario para amantes del vino y profesionales.

Además, este año esperamos “explosionar” después de 2 años de preparación y exploración de nuestros objetivos estratégicos. Estamos alineados con nuestras bodegas y pretendemos lanzar una gran campaña de comunicación cuyo objetivo será trascender a nivel nacional.

A nivel internacional, este 2022 también esperamos aumentar notoriedad en Estados Unidos, después de un 2021 lleno de actividades con este importante (y primer) mercado del vino.

EM. ¿Cómo esperan que sea la añada de este 2022?

Creo que la añada 2021 que terminamos ahora de recolectar va a ser parecida a la 2020, que resultó excelente en esta Denominación de Origen, por las circunstancias agroclimáticas similares y esa Filomena que nos dejó los viñedos nevados en enero, y que garantiza un viñedo sano.

En este 2022, todavía queda mucho por ver, este inicio de año algo caluroso y seco podría ser mejorable, aunque como te digo, es muy pronto.

EM. ¿Cuál es esa mujer que le inspira?

Me inspiran las mujeres sin complejos. Mujeres libres, que se saben divertir, que no hacen daño a nadie y se cuidan a sí mismas.

EM. Esther, ¿cuáles son esas tres tendencias de comunicación en las que debemos poner el foco este 2022?

En el campo de las redes sociales, la famosa democratización de la comunicación está cambiando, las personas perdemos libertad. Los burócratas tomaron el control y paradójicamente la red se ha vuelto más agria y menos agradable. Así que una tendencia es volver a lo clásico, tomar el control de nuestros datos, y de los datos de nuestros clientes, con celo y con seguridad. Manejar tu propia base de datos, tu propia red y tus propias herramientas para comunicar es una tendencia clara. Este canal propio permitirá la personalización al extremo.

En el campo del vino nos vamos al posicionamiento inspiracional, pero hay que tener en cuenta que al consumidor no le vamos a engañar. Debemos ofrecer más en la comunicación; más conocimiento, más información, más datos de interés y mejorar la experiencia del usuario.  Para ello, tenemos la opción de múltiples formatos de consumo: fotos, audio, video, voz…Por último, la responsabilidad social corporativa externa será la mejor arma de comunicación, aunque nunca llega a ser tendencia, ojalá lo sea un día.

EM. ¿Qué es lo que más disfruta de su trabajo?

Me gusta todo de mi trabajo. Sobre todo, cuando sale bien. Diseñar, ejecutar, analizar proyectos propios es un privilegio, soy consciente.

Conocer gente, compartir y ser creativa buscando sinergias… También viajar, y sobre todo, divulgar y vender. Los que hemos estado en la venta, sabemos que hay poco que lo mejore.

EM. ¿Es más de tinto o de blanco? ¡Es dificilísimo elegir! Te diría que soy más de tinto, pero disfruto mucho del vino blanco también, ¡y del Jumilla rosado!

EM. Una palabra que te defina: SENSIBILIDAD. Entender lo que pasa a mi alrededor.

EM. Lo que nunca falta en su bolso: un sacacorchos

EM. Un buen vino, ¿sola o acompañada? Cuando bebes vino, siempre estás acompañada. El vino, es mejor compartirlo, pero no tengo problema a la hora de abrirme un gran vino para mí sola.