Marina Valenti diseña el nuevo local de la heladería Temperato en Murcia
La materialidad y el color son los protagonistas de este nuevo espacio de la cadena de heladerías ubicado en la céntrica Calle Trapería.
La cadena de heladerías Temperato Felice Gelato ha confiado en la interiorista Marina Valenti para realizar el ‘restailing’ del nuevo local que se encuentra en pleno corazón de la ciudad de Murcia, concretamente en la Calle Trapería, y nos presenta un diseño muy innovador donde la materialidad y el color son los protagonistas.
El reto del establecimiento ha sido el diseño de la barra, ya que contaban con muy poco espacio para resolver las necesidades de maquinaria que les exigía el producto y, además, la morfología del espacio, con dos grandes pilares en el centro que no lo pusieron fácil. Por ello, tuvieron que ser muy minuciosos con la distribución y el diseño de este elemento, que finalmente ha culminado con un revestimiento envolvente desde la vitrina principal hasta el mueble cafetero. Este mismo material se ha utilizado también en la fachada para que actúe como hilo conductor del diseño desde fuera hacia dentro y así conseguir una continuidad visual a través de la materialidad.
Existen varios elementos representativos en el espacio que han sido diseñados exclusivamente por Marina Valenti para la marca, como por ejemplo la bancada, un tipo de asiento frecuente en la zona norte de Europa, donde la diseñadora pasó una larga estancia de colaboración. Lo usó como elemento que resuelve el espacio para conseguir la circulación óptima del acceso al baño para personas con discapacidad y a la vez lo utilizó como elemento decorativo que adquiere gran protagonismo.
Las formas redondeadas de su respaldo se comunican visualmente con el arco que envuelve a la vitrina principal que nos oculta los pilares existentes, generando otro elemento representativo del diseño propuesto por la interiorista. Con ello, Marina Valenti pretendía dar una sensación más orgánica, divertida y juvenil.
Las molduras representan a la marca y se encuentran tanto en paredes como en techos. Acompañadas por la textura que presentan la fachada y el mostrador, potencian el estilo clásico que lleva por bandera la marca Temperato.
Por otro lado, el toque disruptivo lo encontramos en la combinación de colores y formatos de los azulejos en acabado brillo, que nos ayudan a crear una composición única que dota de personalidad a todo el establecimiento.
En este proyecto, hay que poner en valor también el tema lumínico. Han trabajado una luz cálida en todo el espacio que permite crear una sensación más acogedora y hogareña y que invita a entrar al local para sentirse como en casa. Han desarrollado foseados con luz indirecta, lámparas de bola en conjunto que aparecen en techos y paredes, y luces de neón que dan un toque muy rompedor y divertido.